LA MÚSICA DEL GENOMA HUMANO

  Según un artículo de ABC.es "Científicos y músicos convierten en una extraña e impresionante melodía las combinaciones del genoma humano".

  La idea surgió cuando el anestesista Andrew Morley se dio cuenta de que las notas musicales tenían un cierto parecido con las secuencias genéticas.
   Nuestro genoma se escribe a través de las combinaciones de las 4 bases nitrogenadas conocidas como Adenina (A), Guanina (G), Citosina (C) y Timina (T), las cuales según el anestesista un compositor podría transformarlas en notas musicales.

  El elegido para hacerlo fue Michael Zev Gordon, que enseguida se dio cuenta de que asignando una nota a cada letra era posible crear una auténtica composición musical a partir de secuencias genéticas. El texto corrió por cuenta de la conocida poeta y compositora Ruth Padel, que además es una descendiente del naturalista Charles Darwin. Lo último fue elegir el coro adecuado, el cual fue el New London Chamber Choir (NLCC), especializado en interpretar temas de la coral contemporánea.

  Cada uno de los cuarenta miembros del coro dio una muestra de ADN que fue decodificada como parte, también, de un estudio científico para determinar si existen diferencias genéticas entre los cantantes y el resto de la gente. Con todo ese material genético en bruto, Gordon asignó las notas correspondientes a cada uno de los miembros del coro y construyó una pieza musical de veinte minutos de duración. 
  Gordon indicó que los seres humanos compartimos más de un 90% del material genético, pero existen en cada gen una serie de polimorfismos, diferencias en la estructura genética de una serie de grupos o individuos. Esas diferencias reciben el nombre de alelos y de sus combinaciones dependen aspectos específicos de nuestra individualidad.
 El trabajo de los científicos consistía en comparar ciertos alelos entre músicos y no músicos; y a partir de esas variables Michael Zev Gordon construyó su composición musical. 

  La pieza coral comienza con una única voz cantando un ritmo sencillo, a la que se van añadiendo más y más voces en una complejidad creciente que pretende reflejar la idea de replicación y reproducción. En el climax de la obra, cada cantante interpreta una parte de su propio código genético.

  En este enlace puede escucharse un fragmento de la obra:
  http://www.bbc.co.uk/news/10579512

BEATRIZ RODRÍGUEZ OREA